Travesía de una ciudadana del mundo
Por: América Belén Viejó
Lcda. en Educación, Cuenca (Ecuador).
A lo largo de la última década he pretendido explorar nuevos lugares y potenciar mis propósitos, y al igual que otras personas lo hice con el anhelo de mejorar, encontrar, aprender, aportar y crear. De esta manera, viajar a un nuevo rincón del mundo con la oportunidad de continuar estudiando me ha hecho descubrir otras maneras de coexistir.
Migrar es uno de los sucesos más inesperados que puede experimentar una persona; está lleno de expectativas, emociones, sabores, visitas, nuevos amigos, recuerdos y sobre todo actitud y tiempo. Esta grata experiencia sin duda, es el reflejo del esfuerzo, la búsqueda y la voluntad de alcanzar un nuevo propósito.
Valencia es el nombre de la ciudad que me ha abierto las puertas y brindado su hospitalidad al igual que a muchos otros estudiantes y turistas del mundo, y así como en varios lugares las primeras impresiones de un nuevo lugar son las jergas y modismos propios tanto de nacionales como locales que marcan uno de los aspectos más característicos de una cultura. Las y los valenciano-parlantes muestran un constante bienestar en su dialecto autóctono que lo trasmiten en cada generación y que continuamente intentan fortalecer y visibilizar haciéndolo parte de su gente desde la formación escolar.
La comida no queda apartada de esta travesía. El fideua, el arroz al horno, la horchata y el fartón, y por supuesto sin dejar de lado la famosa “paella” con la que tanto se sienten identificadas las personas valencianas. A decir verdad, me recuerda tanto el mismo fervor que tienen las y los cuencanos con el motepillo, el hornado, las humitas o el morocho. Es curioso cómo el ser humano se reconstruye a partir de su entorno y de sus propias circunstancias pero la esencia identitaria se mantiene intacta.
La celebración de las “fallas” también forma parte del recorrido cultural de esta bonita ciudad, grandes ejemplares de poliexpán son trabajados por manos artesanas que dedican su vida a la preparación de esta icónica celebración de la comunidad valenciana, con temáticas relacionadas a sucesos que han sido trascendentes a lo largo del año, que han causado impacto en la nación o ideas reflexivas sobre algún hito histórico, el cambio climático, el monopolio sistémico, la igualdad de género, los ODS entre otros. Luego de una larga exhibición y llegado el día “0” estas grandes “fallas” arden simultáneamente al igual que lo hacen los monigotes en año viejo en Ecuador.
Estas y otras vivencias, muestran una vez más que la arquitectura, la gastronomía, las festividades y las personas siempre serán parte de la historia e identidad de una comunidad. El recordar y sentirme identificada con mis orígenes, cultura y tradiciones como ciudadana ecuatoriana y a la vez del mundo me ha permitido analizar, reflexionar y disfrutar sobre aspectos que logran coexistir bajo distintas realidades y formas de vida pero que a la vez muestran similitudes con otras culturas tanto en propósitos, lenguas, naturaleza y saberes que perduran a lo largo del tiempo.
Así que:
Aprovecha las oportunidades y abraza los sueños
Aprofita les oportunitats i abraça els somnis

LEMA: PROTEGIX ALLÒ QUE ESTIMES.