Entre perreo y perreo (I)

Por: Fray Salvador Verdugo

*

Un mar de tantos

Un mar de preguntas atrapadas en su fondo,

me sobra en aguas y en amores,

junto a sombras que iluminan silencios inquietos,

con olas petrificadas y ojos acaramelizados,

para que tanto mares, si no siento la espuma del deseado,

mi mar caribeño, plácido y bravío, que abraza mis añoranzas.

*

Al fondo del silencio

Medito, cierro las puertas de mi alma y allí estás… Siempre tú,

un vacío que no logro descifrar,

con tus alaridos,

lloriqueo con botellas vacías

mientras una penetrante brisa golpea mi oscuridad,

tú, finalmente, resuellas como cascada informal de los días.

*

Estoy seco

Al fondo del mar mi aullido

excava en tus entrañas próximas a morir,

que seca el silencio.

sin el fluir de mi líquido bestial,

Estoy seco, cámbiame el vaso… le falta vino,

sí estoy seco, tú no disfrutaras,

tengo un torrencial de agua seca, reseca como la piel de un dromedario sin joroba,

que camina entre la lluvia de las provocaciones.

 

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