Siete veces, siete (*)
Por: José Espinoza
Estudiante universitario, Cuenca (Ecuador)
Los siete días de la semana te pensé,
en mi recuerdo te quedaste
y con ese pensamiento me iré,
sabiendo que alguna vez me amaste.
Por ti los siete pecados cometí
y tú solamente me utilizaste.
Con todo el corazón completamente destrozado volví
a donde, por primera vez, a mi vida entraste.
Bajo tus pies, hasta las siete maravillas del mundo quise poner,
pero para ti no era más que un juguete que luego botarías.
Yo sería para ti solo otro nombre en tu haber
y con mi amor lastimado con una sonrisa te irías.
Con las siete notas de mi guitarra te expresé lo que sentía;
con mis poemas te enseñé mi alma desnuda.
Junto a los siete colores del arcoíris te juré que por ti todo dejaría
y ahora dentro de mí está solo la esencia cruda,
que de mi quedó y aunque esto me inquiete…
¡Yo te amé siete veces, siete!
(*) Este poema forma parte del libro inédito “Antologías de un niño triste“.