“Que el dolor no nos sea indiferente”
Por: Shirley Ruiz
FSMET Col-Lat, Costa Rica
Ayúdame a contar, porque ellos tienen su verdad
¿Qué historia vive clandestina detrás de nuestras espaldas?
Se atormenta la vida tras los ojos golpeados
mientras las pupilas ardientes se visten con
la ceniza de nuestros miedos
Comemos migajas del piso porque la sociedad nos fue quitando todo y sin derecho violaron nuestros sueños
Hoy no es día de fallecer, la muerte debe esperar
Danos el pan de cada día, sin quitarnos
la ropa que nos cubre del infierno
Gritamos justicia para la humanidad que
ha sido atacada y con sus odios olvidaron
las rayuelas para que nuestros abuelos jueguen
Pausan nuestras voces porque les da miedo
nuestro baile y el cielo prometido se ha
hecho pequeño en el egoísmo de sus ambiciones
En manos de muchos pastores el dinero se ha prostituido y con la falsedad de los políticos almacenan fortunas mientras otros se estremecen de hambre
La escuela negada ha producido hijos
estériles y la certeza del futuro agoniza
en una calle sin techo
Gritamos justicia en la helada oscuridad y entonamos canciones con la fuerza de nuestros cuerpos
Que diluvie donde haya sequía y que los
dioses sin tierra y sin banderas tomen
nuestras manos para escalar montañas de libertad y saciar los corazones que no se cansan